Paseando por un Bien de Interés Cultural del Maestrazgo
Pasear por la naturaleza es un placer, pero si además lo hacemos por una ruta cargada de historia la cosa se vuelve mucho más interesante.
Este itinerario une Allepuz con Villarroya de los Pinares y su principal atractivo es la existencia de un importante conjunto de columnas o pilones de más de 2 metros de altura que nos acompañan durante todo el trayecto.
- La historia de los pilones del Maestrazgo
- La ruta del Camino de los Pilones
- Camino de los pilones, Bien de Interés Cultural
La historia de los pilones del Maestrazgo
La finalidad de estos pilones, datados entre finales del siglo XVIII y principios del XIX, era facilitar el tránsito de caballerías y el comercio de la lana y otras materias primas desde estas poblaciones serranas hacia la costa, pues las duras y exigentes inclemencias meteorológicas de la zona propiciaban la frecuente pérdida de viajeros y comerciantes.
Aunque la construcción de los pilones es bastante posterior, el camino que enlazaba Teruel con Morella y con Levante ya aparece documentado en época del rey Jaime I el Conquistador (s. XIII).
La ruta se inicia desde Allepuz ascendiendo el resalte rocoso por encima del caserío, hasta alcanzar el peirón de San Cristóbal. Junto al mismo comienza la sucesión de pilones de piedra de más de 2 metros de altura, indicando la dirección a seguir.
La ruta del Camino de los Pilones
Cuando estás paseando por esas llanuras elevadas a más de 1.300 m. de altitud, casi sin vegetación y con unas condiciones meteorológicas no del todo favorables, es fácil darse cuenta de la utilidad de los pilones.
Aunque no seamos capaces de comprender del todo la dureza del tránsito de aquellos comerciantes de antaño, la ruta es suficientemente evocadora como para hacerse una idea y apreciar el valor de los pilones.
A mi me venía a la cabeza constantemente el cartón para tapiz pintado por Goya titulado «La nevada», donde representa de forma absolutamente realista el invierno y donde sus protagonistas sufren la rudeza del viento y la nieve.
Un pequeño tramo de sendero asciende la Loma de La Hiedra y pasamos muy cerca de alguno de los pilones más bonitos.
A mitad de camino, el itinerario se interna en un pequeño pinar, y continua en dirección noreste hasta la paridera del Rallao, donde se inicia otro tramo de senda de gran belleza.
El camino desciende hasta el manantial de agua que abastece al aserradero del Tosco, cruza la carretera y prosigue al otro lado del barranco de las Pavías, finalizando en Villarroya de los Pinares.
El recorrido completo son 7,5 km y te llevará 1 hora 45 minutos aproximadamente hacerlo, pero recuerda que es lineal y, si lo haces completo, deberás tener en cuenta la vuelta.
Te recomiendo evitar el verano porque las sombras escasean y puede hacerse muy dura. Del mismo modo, consulta las predicciones meteorológicas y evita los días más fríos del resto de estaciones, en el Maestrazgo hay días de clima muy duro.
Nosotros la hicimos un día de inicio de primavera, nublado, con algo de viento y fresco y fue perfecto para apreciar el encanto de la ruta.
No olvides disfrutar de las dos poblaciones que une el camino, puedes pasarte por la entrada del blog Fin de semana en el Maestrazgo. Los pueblos más desconocidos.
Camino de los Pilones, Bien de Interés Cultural
El camino de los Pilones, entre Allepuz y Villarroya de los Pinares, fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por el Gobierno de Aragón en la categoría de Conjunto Histórico en el año 2008. Entre estas localidades existen 113 hitos, aunque también se localizan otros tramos con pilones en las localidades de Corbalán, El Pobo, Fortanete, Cantavieja, La Iglesuela del Cid y Puerto de Las Cabrillas, en el límite provincial.
La distancia entre pilones varía según los tramos. Entre Allepuz y Villarroya esta distancia es de aproximadamente unos 40 metros.
El Camino de los Pilones, como se conoce popularmente, es el único itinerario de la Comunidad Autónoma, junto con el Camino de Santiago, que posee una figura de protección.